Información sobre los Ácidos de Frutas AHA
Siempre que aparece una nueva moda, suelen hacerse eco de ella muchas empresas de cosmética, centros de belleza así, como el público estimulado a través de las campañas publicitarias. A través de una prensa a veces poco documentada y mediante campañas de anuncios orquestadas por los expertos en marketing, se ensalzó como un gran descubrimiento la exfoliación con ácidos de frutas AHA. Sin embargo las posibles consecuencias negativas a largo plazo no parecían interesar a nadie.
Sobre todo en pieles normales sanas con una capa córnea de constitución normal, resulta que la utilización de esta exfoliación y la consiguiente reducción de espesor de la capa córnea es absurda a todas luces, llegando a ser incluso dañina (p.ejem. la alteración de la película hidrolipídica).
La capa córnea representa una importante barrera protectora para nuestro organismo, la cual no se debería dañar de ninguna manera. Si se reduce el espesor de una capa córnea normal, también disminuye su capacidad protectora. En este sentido nos referimos en concreto a la capacidad foto protectora de la piel frente a la radiación UV, que se verá mermada si la capa córnea no tiene su espesor normal. En este sentido se incrementa el riesgo a padecer daños en las células de la piel con una mayor probabilidad de padecer tumores en el tejido de la piel. Así mismo, el efecto dañino de los rayos UV también propicia el envejecimiento temprano de la piel y la proliferación de arrugas. Si la exfoliación se relega a la etapa invernal (por el menor impacto solar sobre la piel), entonces pueden también aparecer daños por efecto del frío, pero en general también los típicos por el debilitamiento de la función barrera de la piel como son afecciones tales como eczemas y alergias de contacto.
Las exfoliaciones se deben de practicar allí donde exista una capa córnea engrosada, la cual pueda llegar a suponer un potencial problema para la piel. Por ejemplo, en los casos en los que exista un exceso de células muertas en pieles con impurezas, donde se recomendará aplicar la exfoliación, para permitir que las glándulas sebáceas no se taponen y evitar así la causa del acné. En estos casos, los ácidos de frutas representan una excelente y sencilla herramienta para efectuar el tratamiento. El procedimiento consiste en efectuar los tratamientos de exfoliación siempre espaciados prudencialmente en el tiempo, para permitir así, que la piel se regenere convenientemente. Por ello, Dr. Baumann SkinIdent® ofrece sus ácidos de frutas de ácido glicólico (hidroxiacético o AHA) como tratamiento exfoliante. Asimismo, para que los profesionales de la belleza puedan adaptar la intensidad del tratamiento al tipo y al estado de la piel se ofrecen los preparados en concentraciones del 10%, 20% y 30%.
Nota: Los ácidos de frutas empleados para efectuar exfoliaciones están perfectamente indicados si lo que se pretende es reducir a su tamaño normal una piel fuertemente engrosada, en la que la descamación se haya ralentizado y se desee por tanto estimular la renovación celular, máxime si esto puede conducir a problemas como son las espinillas o el acné. Por el contrario y siempre según nuestra experiencia, no es nada recomendable el aplicar exfoliaciones en pieles que gozan de una capa córnea con un espesor dentro de la normalidad.